En la Pasarela Cibeles (Madrid) en la 48 edición Victorio & Lucchino.
La pareja se inspira en la corsetería para vestidos ceñidos que contrastan con otros de formas más amplias. Estos también se ciñen al talle con drapeados que asemejan formas de rosas o simplemente en el escote con tiras de pedrería. Los escotes asimétricos con festones fruncidos o adornos en picado en hilo de torzal enriquecen la extensa colección de la asentada pareja andaluza que se ha convertido en una empresa industrial, una marca para abrir fronteras. En los colores, hay dominio del beige, del violeta y azul chino; y los tejidos van de las sedas a las tafetas. En la colección de hombres, la firma introduce a la sastrería clásica los pantalones cortos y las chaquetas cortas.
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